Hay momentos en los que llegas a un proyecto como quien entra en una película que ya ha empezado, y ese fue exactamente el caso con A Bocados. Miguel, con toda la ilusión del mundo, ya había iniciado las obras de su hamburguesería soñada, pero aún faltaba algo esencial: una identidad de marca que le diera vida a su visión.

La historia detrás del diseño
A veces el orden de los factores sí altera el producto, y en este caso, Carol Sánchez (carolsanchez.es) y yo llegamos como refuerzos de emergencia en medio de una obra en marcha. Lo primero que hice fue explicarle a Miguel algo fundamental: el branding es como los cimientos de una casa - necesitas tenerlo claro antes de empezar a decorar. Es la base sobre la que todo lo demás se construye.

El proceso creativo
¡Qué maravilla cuando encuentras un cliente que confía plenamente en tu visión! Miguel tenía claro que quería algo moderno, con ese toque americano inconfundible, y me dio carta blanca para crear todo a mano. Durante dos semanas intensas, trabajamos codo con codo para definir su imagen de marca. Aunque no estaba completamente terminado, teníamos la paleta de colores y el estilo definidos, lo que permitió a Carol comenzar su magia con el interiorismo.